Eugenio Fuentes reseña de Deshielo y ascensión de Álvaro Cortina Urdampilleta en La Nueva España (5/1/2017)
Una sorprendente ópera prima que agarra y no suelta
Lo primero un aviso: Deshielo y ascensión no es una novela convencional, aunque, básicamente sea una novela de aventuras, con su punto de exploración, goticismo y ciencia-ficción, y también sea una novela culta, con su aquel de biografía de pintor y de pedagogía iniciática. Se trata de un complejo artefacto que enganchará al lector con horas de vuelo. Dividida en cuatro partes, guiada cada una por una voz, la narración, ópera prima del bilbaíno Álvaro Cortina (1983), comienza en una cabaña de cazadores en una tundra septentrional, sin más localización de espacio o tiempo, para después pasar a la base de operaciones de una multinacional, no lejos de aquel refugio, y más tarde internarse en la única ciudad de la desolada superficie helada. La culminación del ascenso, ya pura ciencia ficción, transcurre en una abadía que orbita cerca del sol. De la cabaña a las estrellas, ecos de Lovecraft, Poe, Wells. Y toda una concepción del mundo. Muy sorprendente.